Prometiendo "trabajar con cada nación que comparta esta noble meta", Bush indicó en un editorial publicado este miércoles en The New York Times que el mundo "enfrenta ahora una elección entre un cambio legal y la violencia caótica, entre un conformismo triste y una sociedad abierta y creativa."

"La mayor oportunidad de Estados Unidos es crear un equilibrio de poder mundial que favorezca la libertad", señaló en el editorial, escrito en conmemoración del primer aniversario de los atentados que dejaron 3.025 muertos en Nueva York, Washington y Pensilvania.

"Los intereses y valores comunes entre las grandes potencias también son la base para promover la paz y la seguridad en el mundo", dijo Bush. "Estados Unidos necesita socios para preservar la paz y trabajaremos con cada nación que comparta esta noble meta."

El gobierno de Bush ha recibido críticas por su inclinación a una política exterior unilateral, particularmente en lo que refiere a su dura posición hacia Irak, al que acusa de desarrollar y adquirir armas de destrucción masiva.

Por eso, una comunidad internacional escéptica espera escuchar el jueves las pruebas que tiene Estados Unidos contra Irak, así como más detalles de sus planes de derrocar al régimen de Bagdad, en ocasión del discurso que pronunciará Bush ante la 57a Asamblea General de la ONU.

Hasta ahora, el primer ministro británico Tony Blair y el jefe del gobierno italiano Silvio Berlusconi dieron un apoyo cauteloso a un ataque militar contra Irak. Francia, Rusia y otros aliados insisten que que las decisiones sobre las acciones a tomar se discutan en el seno de la ONU.

Pero Bush, reconociendo que como única superpotencia del mundo Estados Unidos trabaja desde "una posición de fuerza e influencia sin parangón", dijo que su gobierno trabajará "para construir un clima de orden y apertura internacional que permita que el progreso y la libertad florezcan en muchas naciones".